La población de Corea del Norte está más preocupada por conseguir comida cada día que en poder leer y escribir, pero no sólo están más preocupadas por ello, sino que no tienen recursos para poder aprender a leer y escribir. El 99% de la población es analfabeta, un porcentaje realmente sorprendente, pero de este país ya nos sorprenden muy pocas cosas. Es lógico que el dictador y el resto de personas dicen que el país sabe leer y escribir, pero desde luego no hay que creerse nada de lo que puedan decir estos muñecos del dictador.
Esta gran mayoría de la población se encuentra en una situación alarmante, porque tan sólo están trabajando de manera forzada y consiguen algo de alimento, pero por supuesto nada de escribir ni leer, porque cuando menos sepan, mejor será para el dictador y sus marionetas, las mismas que hacen las veces de guías turísticos camuflados. La situación no deja dudas de que la población sufre al máximo la pobreza del país y la mayoría de la población es la que se considera extremadamente pobre.
Ante la falta de recursos para poder leer y escribir, lo único que les importa es seguir viviendo y comiendo cada día, algo que es muy importante en un país como Corea del Norte, cuyo dictador maneja a su antojo a toda su población, la mantiene aislada del mundo y además le ofrece lo justo para que puedan vivir, pero sin ofrecerle algo de cultura para que puedan defenderse en la lectura o que puedan aprender a escribir.